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En estos últimos años, el sector del automovilismo, ha estado experimentando una transición en el consumo de vehículos eléctricos fabricados en Europa a vehículos de procedencia asiática. Este aumento de consumo, ha hecho a la Comisión Europea tomar una importante decisión al respecto, impartiendo unas consecuencias a los fabricantes chinos para equiparar la balanza. A continuación, en este blog de Audioledcar, os ponemos al día sobre la compra de coches chinos en 2024, y las consecuencias que esto conlleva.
Os ponemos en contexto
Si nos preguntan hace cuatro años, cuál era el porcentaje de coches eléctricos de fabricantes chinos que se vendían en Europa, la respuesta sería simplemente el 3%. Ahora, si nos preguntaseis cual es el porcentaje actual, la respuesta sería mucho más elevada; en 2023, este porcentaje fue de un 21,7%.
Los motivos de este aumento son varios, pero una de las principales razones de este aumento, y la más evidente, son los costes de producción. China al poder abaratar este tipo de costes, puede conseguir vender sus vehículos por precios más accesibles, que los que son fabricados en Europa. Esto está causando preocupación en los fabricantes occidentales, que al no ser capaces de equiparar los precios, ven que sus potenciales clientes, prefieren coches chinos por el simple hecho de ser más baratos.
Medidas
Por ello, a partir de este 30 de octubre, entraron en vigor los temidos aranceles, de los que tanto se ha hablado. Hasta esta fecha, estos aranceles eran provisionales, pero con efecto inmediato, las siguientes medidas va a ser implementadas, durante un período de cinco años.
La Unión Europea, ha impuesto unos aranceles a la importación de coches eléctricos chinos. La cantidad que los fabricantes deben pagar corresponderá a la contribución que haya hecho cada uno, según la investigación que realizó la Comisión Europea.
Los más afectados, con la tasa más alta (un 35%) ha sido la marca MG, siguiendo con un 18,8% que deberá pagar la marcaa Geely. Con todo ello, debemos recordar que siguen vigentes las tasas del 10%, que ya imponía la unión europea. Estas medidas, están causando un gran revuelo en el sector automovilístico chino, ya que hay ciertos fabriantes, que deberán pagar aranceles de hasta el 45,3%.
El caso de Estados Unidos, contra los coches «made in china», va más allá, pues también ha puesto en la diana a los softwares chinos, y va a prohibir las importaciones de estos softwares en vehículos conectados, aclamando que pueden facilitar el espionaje.
¿Quién se verá afectado?
Es importante señalar que los aranceles afectan no solo a las marcas chinas, sino también a empresas europeas que producen en China y luego venden esos vehículos en Europa, como es el caso de Volkswagen y otras marcas alemanas. Esto explica por qué Alemania votó en contra de estas medidas.
Sin embargo, hay opciones y alternativas. Cabe recalcar que estos impuestos adicionales, se aplican a las importaciones de vehículos chinos, pero no impide a las marcas chinas continuar en el intento de asentarse en Europa. BYD sigue con sus planes de construir fábricas en Hungría y Turquía.
Los principales afectados serán los fabricantes chinos, que llevan desde julio, viendo como sus ventas continúan en declive en la mayor parte del continente europeo. Fecha que coincide, con la aplicación provisional de estas medidas. Por lo tanto, los consumidores vamos a sufrir también estas consecuencias, al complicarse la compra de coches chinos en el mercado europeo.
Principales dudas
La primera duda que nos puede surgir, es si estas medidas son oficiales y definitivas. Bueno, no podemos estar seguros por completo. Hay rumores de que estas medidas podrían suspenderse si la UE y China logran un acuerdo para nivelar los precios de exportación y evitar estas tarifas. Al mismo tiempo, el descontento de las multinacionales chinas se está empezando a manifestar: la empresa SAIC va a presentar una demanda contra las nuevas tarifas ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea.
Otra duda que puede surgir, es dónde podemos comprar ahora coches eléctricos. Si los precios de los coches chinos, no os convencen tanto como antes, podéis apostar por marcas y modelos como el Tesla Model y y el Model 3, el Sokda Enyaq o el Volvo EX30.
En conclusión, los nuevos aranceles sobre los coches eléctricos chinos representan un esfuerzo de la Unión Europea por equilibrar el mercado de la automoción y proteger a los fabricantes locales de la competencia subsidiada por China. Sin embargo, esto no va a suponer la inaccesibilidad de los europeos para la compra de coches chinos pues estas no tienen pensado retirarse del mercado europeo; algunas, como BYD, planean abrir fábricas en Europa, mientras que otras, como SAIC, han optado por impugnar las tarifas ante tribunales europeos. Esto podría reconfigurar la oferta y los precios en el mercado de vehículos eléctricos en Europa, afectando a consumidores y a la industria en general.
