Ninguna pieza de nuestro coche es eterna. Todo tiene su vida útil determinada, aunque esta puede disminuir si hacemos un mal uso de alguna parte del vehículo. Esto ocurre con el embrague de nuestro coche, una de las piezas más utilizadas al conducir.
Con acelerones, manías y otros malos usos podemos conseguir que esta pieza deje de funcionar, y sin previo aviso (o mejor dicho, sin habernos dado cuenta). Como el tiempo en el que comienza a fallar es corto, lo suyo es que lo compruebes de forma sencilla para evitarte sustos.
Hoy en Audioledcar, tienda de accesorios para coches, te explicamos los síntomas que puede sufrir tu coche cuando el embrague está comenzando a fallar y cómo podemos comprobar que funciona correctamente si dudamos sobre su estado. ¡No te lo pierdas, te aseguramos que lo agradecerás! 😉
¿Cómo notar cuándo se va a romper el embrague?
El embrague deja algunas señales que nos puede ayudar a la hora de confirmar su mal estado. El principal que debe encender nuestras alarmas es si al acelerar, el motor se revoluciona más de lo debido y el coche gana velocidad con proporcionalidad inferior. Si ocurre esto, deberías de llevarlo al taller para hacer su correspondiente diagnóstico.
Además, esto se puede notar más si se está en una pendiente ascendente, porque seguramente a pesar de revolucionarse, el vehículo no avance como debería porque la pieza ya no permite una transmisión de potencia tan directa entre el motor y las ruedas.
Asimismo, existen varios síntomas que son claros indicadores de que nuestro embrague no funciona cómo debería. Entre ellos están:
- Si está duro, porque esto suele ser una señal de que hay un desgaste excesivo del disco. En este caso, habrá que asegurarse que el problema no sea el cable de accionamiento.
- Si nuestro pedal no tiene recorrido o notamos que lo ha perdido.
- Si rasca al meter marcha.
- Si le cuesta que entren las marchas o no se hace de forma suave.
Si esto ocurre, lamentamos decirte que su fecha de muerte es inminente y hay que ir pidiendo cita en el taller porque será cuestión de poco tiempo que deje de poder utilizarse.
¿Cómo evitar que el embrague se rompa?
Como te comentábamos antes, el embrague en algún momento va a fallar, no son para siempre. Pero sí se puede evitar que deje de funcionar porque tus malas prácticas como conductor han acortado su vida útil. Existen algunas acciones que perjudican a esta pieza (y que todos alguna vez hemos hecho):
- Empezar a acelerar con el pedal del embrague todavía pisado. Esto provoca el resbalamiento del disco y su desgaste prematuro.
- Circular con el pie izquierdo sobre el pedal. Acabas generando un uso excesivo de este y luego repercute en su duración.
- Subir el coche a un bordillo.
- Salir de un semáforo a toda velocidad.
- Arrancar en cuesta. Se recomienda utilizar más el freno de mano y no jugar tanto con la coordinación de los dos pedales.
- No pisar el embrague hasta abajo cuando se cambia de marcha.
- Mantener apretado el embrague en semáforos. Es preferible que pongas punto muerto.
Aun así, hay situaciones que no dependen de ti que favorecen que se desgaste el embrague. Por ejemplo, si andamos por la ciudad donde constantemente estaremos utilizando el embrague, el acelerador y el freno, tienes altas probabilidades de que se rompa con mayor facilidad debido al típico arranca-para de las ciudades. En cambio, si solemos conducir siempre por autovía o autopista, tendrá una esperanza de vida útil mucho mayor.
¿Cuáles son los métodos para comprobar si al embrague le queda poco?
La primera opción para comprobar si a tu embrague le queda poco es la siguiente: Con el coche arrancado y detenido en una zona llana y con espacio de seguridad, utiliza el embrague y mete la relación más larga de la que disponga el modelo (quinta o sexta) y suelta el pedal de golpe. Si está en buen estado, se calará al instante. Si no se cala, significa que el disco del embrague comienza ya a patinar y su vida útil se acerca a su fin.
Otra opción es circular en una marcha larga y acelerar fuerte. Si vemos que las revoluciones suben, pero la velocidad no aumenta en la misma proporción significa que el embrague patina. Y si no, puedes poner el freno de mano con el embrague parado, luego meter marcha larga y soltarlo poco a poco. Si el coche no se cala o tarda mucho en hacerlo, es síntoma de que está gastado y patina.
Eso sí, te recomendamos que uses de forma prudente estos métodos de comprobación del embrague ya que estos también favorecen al desgaste.
¿Vas a poner en práctica estos trucos para saber si vas a tener que sustituir el embrague de tu coche? Ya sabes lo que dicen, ¡más vale prevenir que curar! En Audioledcar, accesorios para coche, tenemos los mejores productos para tener tu vehículo en perfectas condiciones y así evitarte sustos tontos. Fundas, protectores de maletero, iluminación led para coche… ¡y mucho más! 🙂