Todas las partes y sistemas de un coche son de gran importancia, pero sin duda alguna el sistema de frenos de todo vehículo es esencial para resguardar la seguridad de sus ocupantes. Por lo que su funcionamiento y eficacia no pueden fallar en ningún momento. Por ello traemos este post en donde podrán saber cuando el sistema de frenos está fallando y así evitar problemas mayores.
Básicamente el sistema de frenos se compone de dos partes principales: la parte hidráulica, compuesta por; el pedal, la bomba, circuitos, pinzas o bombines. Y la parte mecánica, compuesta por; los discos, las pastillas, las zapatas y tambores. Ambas partes a su vez están compuestas de distintos elementos que pueden ocasionar fallas graves en el sistema de frenado, si no se encuentran al día.
Fallas de la parte hidráulica
Si se habla de la parte hidráulica, una de las indicaciones de que el funcionamiento no es el adecuado o que requerida una revisión del sistema de frenos, es el color que adquiere el líquido del depósito, el tiempo, puede ocasionar acumulación de sucio y tornarse oscuro, lo que va disminuyendo la eficiencia de frenado. De la misma forma otro signo relacionado con el líquido del depósito es que el pedal del freno se siente “esponjoso” es decir que no se siente firme.
Para compensar el desgaste de los otros elementos por la fricción, el líquido suele disminuirse muy lentamente. Si este baja de manera repentina ya habría una pérdida de líquido sustancial, lo que puede ocasionar un fallo grande en el sistema de frenos.
Otro problema de parte hidráulica, es la bomba, por lo general una pérdida sustancial y rápida de líquido puede indicar que la bomba de frenos no se encuentra trabajando.
Fallas en la parte mecánica
Un problema bastante común es sentir la vibración en el pedal del freno al frenar, esto es debido al curvamiento de los discos, puede ser por un mal uso o material de elaboración deficiente. Este curvamiento o alabeo es transmitido a las pastillas de los frenos y de esta pasa directamente al pedal por medio del sistema hidráulico. El recomendable en este caso es cambiar las pastillas y los discos del sistema de frenos.
En cuanto a los tambores, el problema más común es el desajuste, lo que puede probar un frenado deficiente, por lo general en la parte trasera. Puede sentirse un frenado largo, un freno de manos indeficiente. En este caso es recomendable el ajuste de las mordazas.
En el caso de las pastillas de frenos, suelen desgastar el material. Por lo general, cuentan con “chivato” o indicador capaz de avisar del desgaste. Por lo que seguramente escuchará un ruido particular.
Los discos de frenos suelen ser la parte que más dura. Sin embargo, hay que estar al tanto del grosor para hacer el recambio.