Si tienes que pasar la ITV ya sabes que hay unos trucos que sí son legales pero otros que no. Son estos.
El testigo del airbag está encendido. «Reparar el airbag me costaba casi 500 euros, así que desmonté el cuadro de mandos e hice un puente con el testigo de los calentadores. Ni se enteraron». Otro conductor encontró una solución aún más original al problema: «conecté un temporizador que mantenía encendido el testigo del airbag durante tres o cuatro segundos al dar el contacto y luego lo apagaba».
2. Las ruedas están totalmente desgastadas. «Hace años tenía las ruedas del coche desgastadas, así que por 20 euros alquilé los neumáticos a un amigo que tenía un coche como el mío. Ahora le he puesto llantas de 19 pulgadas y, para pasarla, hago lo mismo».
3. Tengo un vehículo comercial, pero carezco de extintor en él. El Reglamento General de Circulación obliga a llevar extintores a taxis, autobuses, camiones de más de 3.500 kg de MMA… Por eso, es una práctica habitual «intercambiar los extintores con un conocido para pasar la ITV».
4. Mi coche contamina más de la cuenta. «Me dieron un presupuesto de 800 euros para cambiar el catalizador. ¿La solución? Alquilé un coche como el mío y se lo cambié. Años después, utilicé los pilotos traseros de otro vehículo alquilado para pasarla, ya que mis faros traseros no eran legales».
5. Tengo piezas no homologadas en mi vehículo. El 14 de julio de 2010, se aprobó el Real Decreto 886/2010, que obliga a homologar las piezas que no están instaladas de fábrica para pasar la ITV. Para ello, se necesita un certificado de homologación del fabricante y otro de montaje del taller en el que instalaron las piezas. Algunos conductores aseguran que han conseguido ‘legalizar’ sus kits de carrocería desde el sofá. «Descargué una homologación del fabricante de Internet. A continuación, acudí al taller de un amigo y me hizo un certificado de montaje, sin ver el coche. No tuve problemas para superar la ITV».
Los riesgos de estas prácticas ilegales
Pero, ¿qué consecuencias legales puede tener este tipo de trampas? Además de poner en peligro la seguridad de todos los conductores, y la suya propia, podría enfrentarse a serios problemas legales en caso de accidente. Para empezar, si un agente de Tráfico le da el alto y observa alguna irregularidad, podría inmovilizar el vehículo e imponerle una sanción de hasta 200 euros y hasta tres meses de retirada de carnet.
Además, si se produce un accidente y se demuestra que el siniestro se ha producido por no llevar el vehículo en regla, el seguro podría negarse a cubrir los desperfectos, pues pierdes todos sus derechos. Es más, si hubiese algún fallecido, en un caso extremo podría conllevar incluso una pena de prisión.
La llamada comúnmente ITV en Europa, o la Inspección Técnica de Vehículos, es un trámite de obligatorio cumplimiento para poder circular de forma libre y legal por las carreteras de los países donde se aplica la normativa.
Muchos países han adoptado este tipo de revisión, cada cierto tiempo para así garantizar la total operatividad de los vehículos disminuyendo las probabilidades de averías que puedan originar algún accidente.
En España, por ejemplo, está establecido por leyes, que la ITV, debe cumplirse en lapsos de tiempo de acuerdo a las características y funciones del vehículo, por ejemplo, para los vehículos de clase turismo, la ley dice que debe pasar por primera ocasión la Inspección Técnica, luego de transcurridos cuatro años desde que se ha matriculado, luego deberá repetirse el proceso cada dos años, hasta contar diez años, después de ese momento las ITV se han de realizar una vez al año.
En España, el coste de las ITV depende de la comunidad autónoma donde se realice la misma ya que son negocios establecidos por concesiones administrativas.
Hay ocasiones en las que toca ir a la Inspección Técnica del Vehículo y sabemos que fallamos en algunos elementos importantes por lo que la ITV podría no ser aprobada; en esas ocasiones ponemos en práctica algunos “trucos”, los cuales permitirán salir airosos de la situación pero que no son del todo legales. Ahora veremos algunos de ellos.
En el primer caso, “la luz de las bolsas de aire estaban encendidas y efectuar la reparación para corregir esta situación, tenía un costo algo elevado en ese momento porque estaba un poco corto de dinero, la solución fue desmontar el cuadro de controles y hacer puente con la luz indicadora de los calentadores, ni cuenta se dieron al momento de la revisión y todo funcionó”.
Otro conductor con problemas en las luces indicadoras de las bolsas de aire, opto por hacer una conexión con un temporizador, que mantenía la luz encendida por un cierto tiempo y luego se apagaba, también paso la prueba.
En el caso que los neumáticos están desgastados, los conductores piden a algún amigo los neumáticos necesarios para hacer el cambio y asi al momento de la inspección, estarán en perfecto estado y la prueba será pasada exitosamente.
Hay conductores que alquilan los neumáticos que requieren para sustituir los averiados y tener la prueba superada.
Para los vehículos comerciales, es de carácter obligatorio tener un extinguidor, por lo que, al acudir a la ITV, el mismo debe estar en el vehículo, sea taxi, autobús o camiones que pasen de 3.500 Kgs de MMA, la solución para esta carencia, es pedir uno prestado a algún amigo y todo bien.
Los coches que tienen problemas con los catalizadores, contaminan mucho, por lo que estos deben ser cambiados para corregir el problema, pero si realizar esta reparación resulta muy costosa para el conductor, es posible alquilar un vehículo de similares características al del problema, cambiar el catalizador y acudir tranquilamente a la ITV.
En casos que los vehículos tengan piezas o componentes que no estén homologados por el fabricante, como garantía de seguridad y autenticidad, con buscar alguna aplicación en internet o descargando la homologación del fabricante, todas las piezas se certifican y “cumplirán” debidamente con el Real Decreto que estableció en 2010, que todos los componentes y piezas de los coches deben estar homologados por el fabricante.
Con el problema de la homologación resuelto, no habrá inconveniente por esa parte para superar la ITV.
Las consecuencias de incumplir las normativas y aplicar cualquiera de estos “engaños” a la hora de pasar la ITV, pueden ser muy serias; se pone en riesgo la vida del conductor del coche que tiene fallas y la de cualquier otro con quien tenga un accidente, los problemas legales también dirán presente y las autoridades no temerán imponer multas severas por las situaciones ilegales halladas.
El seguro puede negarse a pagar, si se comprueba que el coche involucrado en un accidente, está fuera de legalidad y que no apto para circular y si ocurre algún fallecimiento, el conductor responsable puede terminar en la cárcel.